Retomamos nuestra sección semanal en Alzira Radio, ‘Vino para quedarse’, con una visita especial a Finca Casa Lo Alto, en plena vendimia 2020 para la elaboración de sus Vinos de Paraje.
El pasado viernes nos desplazamos hasta Finca Casa Lo Alto, donde Víctor Marqués, Director Técnico del proyecto, nos recibe en la entrañable bodega que funciona sin descanso desde 1976. Actualmente está reformada, y su origen se remonta a finales de 1700. Está situada frente a la casa recién reformada que también es su centro de enoturismo.
Allí estaban realizando el descube tras una maceración semicarbónica, que consiste en añadir racimos enteros al depósito hasta llenarlo. De esta manera, las uvas que quedan en el fondo son aplastadas por las que están encima y van soltando el jugo. Las levaduras autóctonas que están en la pruina de las bayas, comienzan a fermentar de manera espontánea el líquido y fruto de esa fermentación, se produce CO2. El CO2 llena el depósito, y, en ausencia de oxígeno, las bayas que no se han estrujado comienzan a hacer una fermentación intracelular. Cuando el nivel de alcohol comienza a ascender, las bayas se rajan y las uvas liberan el jugo y completan el ciclo. Esta técnica se utiliza para extraer color y obtener vinos llenos de fruta.
El paraje de Casa lo Alto
Casa lo Alto denomina a sus vinos, Vinos de Paraje: Un entorno específico y delimitado por una colina en Venta del Moro con condiciones edáficas, históricas y enológicas particulares. Estas características tan especiales, dan como resultado, unos vinos muy singulares: “Cada parcela es diferente, única. Y esa diferenciación es la que queremos meter en una botella de vino” nos cuenta Víctor.
Filosofía: Viticultura respetuosa y en bodega, mínima intervención
Víctor Marqués nos explica cómo practican una viticultura sostenible, respetuosa no solo con el medio ambiente, sino también, con la tipicidad del suelo de la zona. La finalidad es no alterar la meso y macrobiota del suelo y que éste traslade las características del terruño a la materia prima. Lo que se verá reflejado en el vino final: Un gran Vino de Paraje.
“Realizamos un abonado de tipo orgánico de origen animal y preparados biodinámicos encaminados a revitalizar el suelo y llenarlo de biodiversidad”
La mínima intervención promueve que el paraje hable por sí mismo, y se acompaña de sistemas de elaboración y envejecimiento en bodega que ayuden a mantener y potenciar la mayor tipicidad posible.
Los vinos de Casa Lo Alto: Rocha, Manzán y Trena
Casa Lo Alto Rocha es un vino de Garnacha con Denominación de Origen Valencia. La elaboración de Rocha es mediante fermentación semicarbónica en depósito de hormigón con levaduras autóctonas. Tras la fermentación, el vino se transfiere a fudres de madera, se prensa la masa restante y se le añade al mismo fudre el mosto yema, el resultante de esa primera prensada con toda la esencia y concentración de sabor y color. A continuación, estaría preparado para hacer la fermentación maloláctica, en la que se suavizan los ácidos del vino y nos dan ese toque de yogur y lácteos.
Casa Lo Alto Manzán: procede de tres parcelas plantadas entre 1940 y 1965 de la variedad Bobal. Son viñas viejas, en vaso, en suelo arcilloso calcáreo y pobre en materia orgánica. En bodega, la uva se despalilla, pero no se estruja y también realiza una fermentación espontánea con levaduras autóctonas. Tras la fermentación, el vino se transfiere a barricas con sus propias lías donde reposará durante 10 meses.
Casa Lo Alto Trena: es un nuevo vino, creación reciente realizado con la variedad Tardana. Se trata de una variedad autóctona de la Comarca, de hollejo grueso y ciclo largo. Está perfectamente aclimatada al ecosistema de interior de la comunidad valenciana a más de 700 metros sobre el nivel del mar. Se vendimió en octubre de 2019 a mano y en cajas de 15 kilos para preservar todas las propiedades de los racimos. Realizó una fermentación espontánea con levaduras autóctonas en depósitos de hormigón y fudres de roble de gran capacidad. Allí reposó con sus lías finas hasta el embotellado, tras una ligera filtración.
La imagen de estas botellas de vino es un guiño a la historia de aquellas tierras, pero con una visión moderna. Como Casa Lo Alto: tradición, experiencia y vanguardia.
La finca Casa lo Alto inauguró su bodega den 1976. Tiene 60 hectáreas de viñedo de diferentes variedades como Bobal, Garnacha, Tempranillo, Cabernet Sauvignon, Syrah y Chardonnay. Parcelas rodeadas de 60 hectáreas de masa forestal y almendros, que conforman un paraje único. Unido al estilo de vinificación, definen el carácter especial de estos vinos.
Más información: www.casaloalto.com
Enoturismo: info@casaloalto.com 96 295 59 98
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